Continuidad de Estudios y Movilidad Social

En un país donde más de 1,3 millones de personas cursan estudios superiores (Mineduc, 2024), la Continuidad de Estudios es clave para crecer profesionalmente, mejorar la empleabilidad y democratizar el acceso a la educación, especialmente en territorios como la región de Tarapacá y la Araucanía, pero en general es una necesidad país. Así técnicas y técnicos pueden avanzar obteniendo un título profesional sin dejar sus trabajos ni postergar su vida personal.

En la Universidad Arturo Prat, esta misión tiene un valor simbólico, al llevar el nombre de un héroe que entendía el poder del aprendizaje. Prat estudió Derecho mientras servía en la Armada, convencido de que el conocimiento era fundamental para servir mejor a Chile.

Inspirados en este legado, hoy la UNAP ofrece más de 34 carreras de Continuidad de Estudios con sedes, además de centros docentes y de vinculación, distribuidos desde Arica y Parinacota hasta la Araucanía. Diseñadas para quienes ya están en el mundo laboral, estas carreras se imparten en formatos flexibles y horarios vespertinos, que permiten compatibilizar estudios, trabajo y familia.

Entre el 2014 y el 2024, 14.358 personas se titularon en estos programas. En nuestra Casa Central de Iquique, 3.198 egresadas y egresados representan historias reales de esfuerzo, superación y transformación personal, familiar y social.

En un mundo que cambia constantemente, crecer laboralmente exige aprender, adaptarse y actualizar competencias. Ya no basta con cambiar de empleo, ni ciudad, la educación continua es esencial para enfrentar los nuevos desafíos y generar nuevas oportunidades.

Así como Prat sirvió a Chile a través del conocimiento, hoy miles siguen ese camino en nuestra universidad. Como institución pública y regional, reafirmamos el compromiso con Tarapacá y el norte, construyendo futuro día a día, estudiando y trabajando al mismo tiempo.