ULagos logra instalar moderno sistema de observación oceanográfica en línea
La boya cuenta con un dispositivo que permitirá entregar cada una hora los datos que vaya registrando, los que serán información pública para todo quien la necesite. 17.03.2017. Puerto Montt….

17.03.2017. Puerto Montt. En pleno seno de Reloncaví, específicamente a 20 kilómetros de las costas de Puerto Montt se instaló la primera boya oceanográfica de la región de Los Lagos. Se trata de uno de los proyectos más ambiciosos de recolección de datos sobre el comportamiento temporal de las condiciones oceanográficas de la zona.
La iniciativa es liderada por el Doctor en Oceanografía de la Universidad de Concepción, Iván Pérez-Santos quien forma parte del equipo de investigadores del centro Imar de la Universidad de Los Lagos. En junio del año pasado postuló con éxito al V Concurso de Equipamiento Científico y Tecnológico Mediano FONDEQUIP de Conicyt, logrando adjudicarse recursos por un monto de 136 millones de pesos, además de 27 millones que serán aportados por la Universidad de Los Lagos.
Según explicó el Dr. Iván Pérez, la boya fue presentada a licitación pública la cual fue adjudicada por la empresa española Casco Antiguo, con representación también en Chile. Esta empresa fue la encargada de comprar el equipamiento y de acuerdo a las características que se requerían, el mejor proveedor fue la empresa de Inglaterra OSIL (Environmental Instruments and Systems).
De todas las boyas que existen en Chile fundamentalmente en la zona de Concepción y hacia el sur, ninguna tiene la posibilidad de medir corrientes marinas. La que acaba de instalar la Universidad de Los Lagos es pionera en contar con esa medición en el océano, lo que en la práctica permitirá identificar el origen de los fenómenos que se produzcan y hacia dónde se dirigen.
“Hay otras boyas y se arman con diferentes intereses, nosotros tomamos como base la ley de Pesca y Acuicultura 20.434 de abril de 2010, que en su artículo 87 expresa todos los parámetros que es necesario medir y de acuerdo a eso armamos la boya, por eso esta es la primera boya que cuenta con todos esos sensores, es como un parámetro y lo que queremos es que todos quienes utilizan este ecosistema marino de la Patagonia la tengan como ejemplo”, sostuvo el Dr. Pérez Santos.
Características
La boya fue anclada en el fondo del mar con un bloque de hormigón que pesa 8 toneladas, luego continúan 100 metros de cadena gruesa y sigue hacia la superficie -aún bajo el agua- con los instrumentos que fueron agregados a esta boya como son los equipos que miden corrientes marinas. Sobre ella, ya en la parte superior se instaló una estación meteorológica.
La primera boya oceanográfica de la ULagos que ya está en medio del mar, cuenta con 3 módulos: Módulo atmosférico, medición de variables marinas (temperatura, salinidad, oxígeno, ph, clorofila A y la turbidez del agua) además de las corrientes marinas por niveles hasta los 100 metros de profundidad.
Con la ejecución de este proyecto titulado “Sistema de observación oceanográfico en línea para la prevención de catástrofes ambientales en la región de Los Lagos”, se busca tener datos cada una hora, los que vaya arrojando el instrumento y que serán públicos para la correcta toma de decisiones. La información se transmite a través de un sistema de transmisión celular que llegará a uno de los computadores de IMar.
Con esta boya oceanográfica fenómenos como la marea roja o nociva floración de algas podrían ser detectados a tiempo, lo mismo se espera para otro tipo de emergencias ambientales como la mortalidad de peces, erupciones volcánicas o eventos climáticos extremos.
El operativo para que la boya llegue a su destino
Fueron dos intensos días de trabajo los necesarios para que la boya oceanográfica llegara al puerto y desde ahí hasta el agua.
La empresa que estuvo a cargo del trabajo de logística para trasladar la boya al embarcadero y desde ahí subirla al barco, además de la preparación de maniobra para anclarla fue Oxxean, quienes con su dilatada experiencia apoyaron la realización de esta labor junto a su personal en tierra y a bordo. Del mismo modo se contó con el apoyo logístico de la Quinta Zona Naval de la Armada.
Desde Inglaterra llegó un representante de la empresa que tuvo a su cargo la construcción de la boya, Thomas Ballinger, quien durante toda la semana se encargó de ensamblar cada una de las piezas necesarias para que el instrumento cumpliera con su gran objetivo de recolectar información. Incluso cuando la boya era trasladada al mar, Ballinger incrustaba todos los dispositivos y sensores necesarios para que nada fallara.
“Se armó primero todo el aparato electrónico, luego trabajamos en el ensamblaje de la boya física y luego se incorporaron todos los sensores dentro de la boya, sensores de corriente y químicos, para finalmente trasladarla al agua. Nuestra misión fue ensamblar y llevarla al agua para que quede ya entregando datos a la universidad”, explicó Gustavo Rival, director del departamento de Oceanografía de la empresa Casco Antiguo que se adjudicó la licitación.
“Nosotros somos empresa española con casa matriz en Madrid y sucursal en Chile. Nos encargamos de proveer de equipamiento y tecnología submarina en general, en este caso equipamiento oceanográfico. Para este proyecto tuvimos que pensar en una logística bastante grande”, agregó Rival.
Este instrumento según el director del proyecto, Dr. Iván Pérez-Santos, tendrá una mantención mensual, oportunidad en que otros investigadores aprovecharán de realizar nuevas mediciones en el lugar donde está ubicada -desde el jueves- la primera boya oceanográfica de la ULagos.
Fuente: Comunicaciones ULagos