Universidades en crisis

Hoy, nuestras universidades deben luchar por su sustento y competir ferozmente por recursos que no garantizan estabilidad alguna.

Alberto Martínez 05-12-2024 / 18:01:57

Con preocupación y honda tristeza observamos cómo las dificultades económicas afectan a nuestras universidades, llevando incluso a la desafortunada desvinculación de valiosas y valiosos integrantes de sus comunidades.


¿Cómo es posible que las universidades, consideradas las instituciones más confiables, enfrenten tantas carencias? La respuesta radica en un sistema educativo que exige excelencia en docencia, investigación y vinculación, además de gestión impecable. Sin demostrar viabilidad y sostenibilidad, una universidad arriesga su acreditación y pervivencia, subordinando así, el sabera las exigencias del mercado.


A primera vista, esto podría parecer razonable, pero la raíz del problema está en una pregunta clave: ¿Cómo se financian nuestras universidades?. En Chile no existe un financiamiento basal suficiente para sostener la complejidad de la formación profesional, la generación de conocimiento y el compromiso con el entorno.


Frente a un sistema que prioriza la competencia y se basa en recursos inciertos, las aspiraciones legítimas de las comunidades quedan desatendidas. Un ejemplo claro son las universidades del Estado, que concentran solo el 16% de la matrícula de educación superior. Por otra parte, para su operación reciben en promedio apenas un 22% de su presupuesto como aporte basal.


Hoy, nuestras universidades deben luchar por su sustento y competir ferozmente por recursos que no garantizan estabilidad alguna. Esta carrera por la sobrevivencia lesiona no solo su autonomía, sino también su misión fundamental de servir como motores de equidad y movilidad social.


Hace cinco años, en la Universidad Arturo Prat enfrentamos una crisis profunda. Con resiliencia y unión superamos los desafíos y construimos un proyecto sostenible, reafimando nuestra Misión educativa y social. Por ello, expresamos nuestra solidaridad con las universidades hermanas que enfrentan adversidades, seguros de que, con su vocación y compromiso territorial, emergerán fortalecidas, siendo pilares de un futuro más justo y equitativo.

Imagen
Alberto Martínez
Rector de la Universidad Arturo Prat